Férulas nocturnas
Uno de los mecanismos para tratar el dolor facial y mandibular es el uso de férulas nocturnas. Estas son dispositivos personalizados para el paciente y están diseñados para reducir el impacto del bruxismo durante la noche y, con ello, el dolor facial y mandibular asociado. El tiempo de recuperación del dolor facial y mandibular con las férulas nocturnas varía según la gravedad del bruxismo. No obstante, se puede observar alivio significativo del dolor facial y mandibular en semanas. Por ello, se recomienda un uso constante durante la noche y revisión periódica para ajustes.
Terapia física
Para tratar el dolor facial y mandibular también se recomiendan ejercicios y técnicas específicas para fortalecer y relajar los músculos mandibulares. El uso de esta técnica requiere, como tiempo de recuperación, desde varias semanas hasta meses, dependiendo de la respuesta individual del paciente de dolor facial y mandibular. En ese sentido, se recomienda que para su efectividad exista el compromiso regular con los ejercicios y el seguimiento con el terapeuta para aliviar eficazmente el dolor facial y mandibular.
Tratamientos dentales
Como se ha detallado anteriormente, una de las causas del dolor facial y mandibular está relacionada a los dientes. Por ello, se puede tratar el dolor facial y mandibular mediante tratamientos dentales específicos que aborden problemas dentales como caries e infecciones que contribuyen al dolor. En estos casos, el tiempo de recuperación varía según el procedimiento dental. Puede ser desde días para empastes hasta semanas para tratamientos de conducto. Asimismo, se recomienda al paciente de dolor facial y mandibular seguir un mantenimiento dental regular y buscar la atención temprana a problemas identificados.
Manejo del estrés
El dolor facial y mandibular está relacionado a problemas de estrés, por lo cual en su tratamiento pueden contribuir las terapias cognitivo-conductuales, mindfulness y técnicas de relajación para abordar el componente emocional. Al ser una de las causas más complejas del dolor facial y mandibular, el tiempo de recuperación no está definido y requiere de un proceso continuo. Se observa mejora en el dolor facial y mandibular a medida que se implementan las técnicas. Por ende, se recomienda la integración de técnicas de manejo del estrés en la rutina diaria.
Tratamientos ortodónticos
Las maloclusiones dentarias en algunas ocasiones pueden contribuir al dolor orofacial al no tener la mordida una posición estable de reposo. El tratamiento ortodóncico permite corregir la maloclusión dental con brackets, alineadores u otros métodos. En este caso, se requiere de un tratamiento que va desde meses hasta un par de años, dependiendo del tipo de tratamiento ortodóntico requerido para aliviar el dolor facial y mandibular. Además, se requiere de un seguimiento regular con el ortodoncista y los otros profesionales involucrados para aliviar el dolor facial y mandibular.
Medicamentos
Como parte del tratamiento del dolor facial y mandibular, también se considera la administración de medicamentos. Estos pueden ser analgésicos, relajantes musculares o medicamentos específicos para abordar la inflamación o irritación nerviosa que causa el dolor facial y mandibular. Según el medicamento a administrarse y la intensidad del dolor facial y mandibular, el tiempo de recuperación variará, además de considerarse la respuesta individual del paciente. La administración de medicamentos para el dolor facial y mandibular implican un alivio sintomático a corto plazo por lo que suele ser un mecanismo de ayuda a otros tratamientos. De igual forma, se recomienda el uso de medicamentos para el dolor facial y mandibular según indicación médica y el monitoreo de efectos secundarios.
Cirugía:
Según el tipo de dolor facial y mandibular, y sus causas, se pueden recomendar las intervenciones quirúrgicas para abordar fracturas, trastornos articulares graves o tumores. El tiempo de recuperación, en este caso, es variable según la complejidad de la cirugía y puede ser desde semanas hasta meses. Es importante seguir las indicaciones postoperatorias y la rehabilitación kinesiológica según sea necesario, de modo que se corrija el problema y se alivie el dolor facial y mandibular.
Recomendaciones generales para el tratamiento del dolor facial y mandibular
Seguimiento profesional: Ergovida recomienda buscar la orientación de profesionales de la salud, como kinesiólogos especializados, odontólogos o neurólogos, para un diagnóstico preciso y un plan de tratamiento adecuado del dolor facial y mandibular.
Cumplimiento del tratamiento: La adherencia a las recomendaciones y tratamientos prescritos del dolor facial y mandibular de manera consistente para optimizar los resultados es una de las claves desde la experiencia de los pacientes de Ergovida.
Estilo de vida saludable: Mantener hábitos saludables, incluyendo una dieta equilibrada, ejercicio regular y manejo adecuado del estrés para prevenir el dolor facial y mandibular es otra de las recomendaciones infaltables de los profesionales de Ergovida.
Comunicación abierta: Informar a los profesionales de la salud, como los expertos de Ergovida, sobre cualquier cambio en los síntomas o efectos secundarios durante el tratamiento del dolor facial y mandibular.
Prevención: Ergovida recomienda identificar y abordar tempranamente factores desencadenantes del dolor facial y mandibular, como el bruxismo o el estrés, para prevenir la recurrencia del dolor facial y mandibular.